El día anterior a la huelga general, yo estaba en mi mesa de trabajo, cuando vino el gerente de mi empresa, me pregunto si yo iba a hacer huelga, por supuesto y aunque podría no haberle contestado, le dije que si, su respuesta fue que no se iba a conseguir nada y que buena gana de perder un día. Mi postura fue muy clara, le dije, que desde luego con esas ideas no se iba a ningún sitio y que que yo si iba a secundar la huelga, pero no solamente para protestar contra esta reforma laboral, si no para defender el futuro de mis hijxs y por que no también para defender el futuro de la empresa en la que trabajo, ya que esta huelga no se hacia contra las empresas, si no contra una reforma laboral digna de la mas cerrada dictadura. Los que íbamos a secundar la huelga, no solo lo hacíamos por defender nuestra dignidad y nuestros puestos de trabajo, si no también para defender a las empresas en las que trabajábamos. No solamente seriamos victimas los obreros si no también las pequeñas y medianas empresas que también serán perjudicadas por la reforma, ya que esta hecha tan solo a la medida de las grandes empresas y el gran capital, hechos que estamos viviendo a diario, pues nos toca abaratar los presupuestos ya que las grandes compañías, están machacando a las pequeñas empresas puesto que estamos llegando al momento en el que es imposible competir con ellas.
La verdad es que el hombre se quedo un poco flipado con la explicación, el no fue ese día a trabajar, sin embargo si hubo compañeros que fueron, sobre todo de oficina.
La explicación que le di al gerente de la empresa en la que trabajo, se hace análogo al pequeño comercio, hay grandes almacenes y grandes cadenas de distribución que estan devorando al pequeño comercio, pues cada día vemos mas locales cerrados con carteles en los que indica "Se traspasa" o ya ni eso, directamente "Se alquila", por que no hay forma de traspasarlo.
Quizás estos pequeños comerciantes, no se han parado a pensar que el apoyo a la huelga, habría aportado mas beneficios que perjuicios.
Puede que haya sido Egoísmo, Insolidaridad, apatía a los movimientos sociales y sindicatos o simplemente la ignorancia del arrogante que por tener un pequeño negocio, un coche y un techo, se creen en la riqueza.
En el fondo podemos sentir lastima por ellos, por que quizás era una oportunidad de conciliación con esa clase obrera de la que forman parte, pero que no lo quieren reconocer. Seguro que en su turno de recorte, se beneficiara mas a las grandes superficies que al pequeño comercio, entonces y solo entonces será cuando se acuerden de que forman parte de la clase trabajadora y que aquella huelga también era para defender sus comercios, será en ese momento cuando pidan ayuda y quizás ya no tengan a nadie para ayudarles.
Manuel V.
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